Medio año con Pequeña

Pequeña ya ha hecho seis mesecitos. Medio añazo ya ha pasado.

Y ya no es un bebé (cualquiera que me lea...) ya no hay que sujetarle la cabecita cuando la cojo, ya no duerme tantas horas al día, ya no quiere solo tetita... ahora tengo que empezar con la alimentación complementaria (lo alargo todo lo que puedo de puro vaga, con la teta estoy comodisima), ya quiere descubrir mundo, cuando la tengo en brazos no deja de estirar el cuello para tener todo controlado, empieza a arrastrarse (de momento para atrás y gira sobre si misma), todo lo que está a su alcance lo coge para meterselo en la boca (un cuidado...) y desde luego que ya empieza a marcar su carácter (¡y menudo carácter!).

Espero tener un tercero (dentro de un tiempo porque quiero disfrutar de ellas y me reclaman demasiado como para ocuparme ahora mismo de otro) quizás dentro de tres o cuatro años. Y espero poder tenerlo, que las circunstancias me lo permitan, porque no me estoy despidiendo de mi embarazo, ni de mi parto, ni de los días que van pasando de Pequeña porque espero que vuelvan a pasar. Eso si, lo estoy disfrutando a tope.

Muchas cosas han cambiado desde que me convertí en madre por primera vez. He madurado y he crecido como persona y no veo el mundo con los mismos ojos.

Antes era era pro Estibill, ahora adoro a Carlos Gonzalez.

Antes quería la epidural en el parto a toda costa y con Pequeña me anime a tenerla en casa.

Antes no sabia que era el colecho, ahora lo práctico.

Antes no conocía el mundo de la lactancia prolongada, a Mayor la di dos años y Pequeña tendrá los que quiera.

Antes desconocía la crianza natural y ahora abogo por ella.

Antes no sabia que era ser madre y poco a poco voy formandome.